Desde que vivimos en el piso actual hemos cambiado varias veces de reloj de cocina. Desde el primero, que dejó pronto de funcionar, un extraño mosqueo se ha apoderado de nosotros. Cuando este primer reloj se paró, le cambiamos la pila, como era lógico, pues debía haberse acabado. Poco duró. Y después de varios cambios de pila, comprobamos que era otro el problema. Solución: reloj nuevo. Con el siguiente ocurrió algo similar. A pocos días del cambio comprobábamos que la hora no era la correcta: se había parado. Así varias veces, y vuelta a cambiar la pila, con el mismo resultado.
Las fotos que pongo son de los dos últimos relojes. El gris es el penúltimo, que respondió de la misma incordiante manera. El segundero moviéndose de delante a atrás, de atrás a delante, como un péndulo, sin salir del mismo lugar, y con las demás manecillas inmóviles. Compró mi mujer otro, aunque le volvió a cambiar la pila a éste, colgándolo en un perchero que hay en el cuarto de la plancha. Otra vez nos sorprendió, pues volvió a funcionar como si nada hubiera pasado... hasta que se paró como se ve en la foto, días después.
El naranja es el último. Ayer, cuando mi mujer lo descolgó para limpiar la cocina, funcionaba. A medio día se había parado, de la misma manera... con el segundero moviéndose a duras penas, como el dichoso péndulo que quiere avanzar pero vuelve a ocupar el lugar de su eterna reclusión en un periodo corto de tiempo. Lo volvimos a poner en hora y se desquitó de su maldición, aparentemente. Por la noche se quedó en ese "segundo de la marmota", donde el tiempo se repite, con un corto intervalo. Mi mujer ha dicho ¿habrá una maldición en esa pared? Tantos relojes estropeados en solo tres años es para intrigarse. Hoy le he cambiado la pila. Miedo me da mirar. ¿Se habrá parado de nuevo? ¿Cuanto durará en marcha? ¿Veremos de nuevo al segundero moverse como el péndulo maldito? ¿Tendremos algún fantasma fastidiándonos con los relojes? Misterio, misterio .